sábado, 2 de mayo de 2015

Nepal, siempre en mi corazón

Swayambhunath

Todos nos sentimos impactados cuando nos llegan noticias de catástrofes que han causado muertes y sufrimiento a un gran número de personas, pero si eso ocurre en un país que conoces y que amas, todavía resulta más duro.

Nepal y sus gentes no merecen lo que les ha ocurrido. Mis amigos y conocidos están bien, pero me duelen igual los miles de muertos, los seres humanos que han perdido a sus familias, sus casas, sus exiguas pertenencias. Me duelen esos templos derruidos, Patrimonio de la Humanidad, con muchos siglos de historia, entre los que paseé, que admiré, que fotografié y que hoy se ven reducidos a escombros.

Durbar square, un conglomerado de templos del siglo XII en el corazón  de Katmandú, ya no existe; tampoco los conjuntos arquitectónicos de Patan o  Bhaktapur, lugares únicos en el mundo que eran un reclamo turístico y fuente de ingresos para uno de los países más pobres del mundo.
Durbar square

Me siento en deuda con Nepal. Dicen que Asia te cambia por dentro, y es cierto. Sobre todo cuando tienes la oportunidad de convivir con su gente como lo hice yo durante dos meses; almas sencillas, acogedoras, nobles, dignas en su pobreza, y siempre con una sonrisa en los labios ofreciéndote lo poco que tiene.

De buena gana volvería allí para ayudarles en lo que pudiera, pero lo que necesitan son profesionales, medicinas, comida, agua, viviendas... Lo único que puedo hacer es ofrecerles una modesta ayuda económica, y os pido que hagáis lo mismo en la medida en que podáis. Os dejo aquí un enlace de ONGs y entidades que tienen cuentas abiertas para ayudar a Nepal, pero hay muchas más; elegid la que prefiráis pero no les olvidéis, yo no lo haré.
Ayuda a Nepal

Namaste.



8 comentarios:

  1. En una tragedia tan grande lo que están sufriendo. Enseguida pensé en ti y en tus amistades de aquellas tierras, y en tu Katmandú querido.
    Es triste, muy triste.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. Hola Lola... Que casualidades mas trágicas tiene la vida, que gran tragedia en el Nepal, y todo eso justo cuando empiezo a leer tu novela "Nunca fuimos a Katmandú"...
    Un abrazo...

    ResponderEliminar
  3. Siempre relacionaré Nepal contigo pues lo poco que se de este pais lo conozco a través de ti que con tanto cariño has escrito sobre él.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  4. Hola Anna,
    pues sí, muy triste. Espero que no nos olvidemos de ellos como nos olvidamos de todo.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  5. Llorenç,
    pues ya ves. Y hace dos semanas estaba firmando Nepal cerca de las estrellas en Sant Jordi.
    Muchas de las cosas que describo en ese libro ya no existen.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  6. Hola Uno,
    mucha gente ha conocido Nepal a través de mí porque me enamoré de ese país y de su gente.
    Espero que se recuperen y muchos de los que han sentido curiosidad puedan visitarlo.
    Besos

    ResponderEliminar
  7. Es muy triste, Lola, y entiendo que a ti te haya afectado especialmente. Tras leer tu libro, sé que parte de tu corazón quedó en Nepal. Yo mandé mi ayuda a través de Unicef. Una ayuda modesta, pero si todos colaboramos se puede convertir en muy grande.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  8. Hola Maribel,
    es cierto, la ayuda individual que podemos aportar parece pequeña, pero muchas pequeñas ayudas hacen una muy grande. Además, lo que a nosotros nos parece a nosotros que no es nada es una fortuna para ellos, ahora más que nunca.
    Un beso.

    ResponderEliminar

Deja la huella de tu pata.

LinkWithin

Related Posts with Thumbnails